Torre del Reloj

Torre del Reloj

  • Título actividad: La restauración del segundo mecanismo del reloj
  • A quién va dirigida: a todos los públicos
  • Fecha: Junio de 2022
  • Descripción: Durante el año 2022, se celebra el 250 aniversario de la torre con diversas actividades y actuaciones, una de ellas la restauración del reloj antiguo de la torre.

De Linterna a Torre del Reloj

Hacia 1477 empezó la construcción de la infraestructura portuaria de Barcelona. El actual muelle de Pescadors, en los siglos XVI y XVII se encontraba en medio del mar, a más de 600 metros de la fachada marítima de la ciudad. Durante tres siglos, el puerto iba avanzando con diversas construcciones, hasta que, en el año 1772, con el crecimiento del tráfico marítimo de la época, se ampliaron los límites portuarios y en el extremo del brazo de poniente del dique, hoy muelle de Pescadors, se construyó esta torre como faro.

A principios del siglo XX, la constante evolución de la infraestructura portuaria hizo que la linterna de 1772 perdiera su sentido de señalizar la entrada del puerto hasta el punto de que se propuso su desaparición.

Finalmente, la Junta de Obras del Puerto decidió conservarla por su valor histórico y sólo derribar los edificios que rodeaban la torre, Capitanía, Sanidad y varios almacenes. En 1912 se sustituyó la cámara del faro por un gran reloj de cuatro esferas. El reloj original fue montado por Josep Besses, relojero de la Real Academia de las Ciencias.

Esta estructura que se conserva hoy en día y se conoce popularmente como torre del Reloj, es el elemento arquitectónico más antiguo del Port de Barcelona. Durante el año 2022, se celebra el 250 aniversario de la torre con diferentes actividades y actuaciones, una de ellas la restauración del reloj antiguo de la torre.

 

El reloj

El reloj conservado, y que actualmente podemos ver en el recibidor de la torre, es de Manufacturas Blasco, empresa dedicada a la relojería en la localidad de Roquetes (Baix Ebre, Tarragona), fundada en 1921. Poca información tenemos sobre la procedencia de este mecanismo de reloj, pero las referencias y similitudes encontradas con otros mecanismos de la misma época y de la misma empresa nos dan a pensar que su construcción y colocación es probablemente anterior a 1960.

El reloj está constituido por varios elementos de hierro y otras aleaciones de cobre, así como madera. Antes de la intervención presentaba abundantes restos de grasa propios de su uso y mantenimiento, factor que atraía y provocaba la adhesión del polvo y la suciedad. Estos restos de grasa y polvo enmascaraban la superficie de la maquinaria, haciendo poco distinguibles los distintos metales que conforman la maquinaria, el hierro y el latón, y otros detalles como etiquetas, la policromía, etc. La esfera de cerámica esmaltada también contenía bastante suciedad y grasa, dificultando su lectura.

La oxidación y corrosión eran degradaciones presentes también en el objeto, por su proximidad a las sales del ambiente marino y a la humedad elevada.

Cabe destacar que el reloj se encuentra incompleto, dado que presenta la rotura y desaparición de los péndulos.

Fotografías antes de la restauración. Pol Camps y Ramon Maroto. APB 2022
 

Las degradaciones mencionadas anteriormente y la voluntad de exponerla al público han hecho que se vieran necesaria una restauración a principios de año. La actuación de conservación-restauración ha consistido en devolverle un mejor aspecto a la pieza y en garantizar su conservación futura, realizando una mínima intervención:

  • Limpieza mecánica en seco: limpieza superficial del objeto mediante paletinas y aspirador para eliminar el polvo y suciedad más superficial.
  • Limpieza química: es un tipo de limpieza más profunda que la primera, cuyo objetivo es eliminar la grasa y la suciedad más adherida que con aspiración no se ha logrado retirar. Se han realizado pruebas de disolventes con disolventes de diferente composición y de menor a mayor efectividad según los últimos estudios de conservación-restauración, para encontrar el mejor método de limpieza, respetando la obra y su policromía. Durante el proceso de limpieza se ha observado con detenimiento que el disolvente utilizado no afectara a la policromía o a las capas superficiales del metal. Debido a que los metales se ven afectados por la humedad se han descartado tratamientos acuosos para la limpieza.
  • Eliminación de la corrosión: eliminación de los focos puntuales de óxidos y corrosión de los metales por medios abrasivos mecánicos suaves.
  • Inhibición de la corrosión: se ha aplicado sólo en las zonas donde la corrosión era evidente. La finalidad de este proceso es la de parar el efecto de la corrosión para que no se extienda y afecte al resto del material.
  • Capa de protección final: se ha utilizado una resina sintética y superficialmente una cera microcristalina especial para este tipo de metales, evitando así la oxidación en otros puntos que hoy se encuentran en buen estado de conservación. Esta capa final ayuda a aislar el metal de la humedad del ambiente y permite la conservación de la pieza en mejor estado de conservación.

Fotografías durante el proceso de limpieza de la restauración. Pol Camps y Ramon Maroto. APB 2022
 

El proceso de conservación del objeto no sólo termina en la intervención de la pieza sino que, también como medidas de conservación preventivas, se ha hecho una vitrina a medida, el máximo estanca posible para evitar la entrada de polvo y agentes degradantes para el objeto y, además, se controla la humedad interna de la vitrina con un gel que absorbe y regula la humedad relativa del entorno, evitando la acumulación elevada de humedad que podría ser muy perjudicial para el objeto.

Fotografías después de la intervención de conservación-restauración. Pol Camps y Ramon Maroto. APB 2022
 

Galería de imágenes de la Torre del Reloj

Fotografías de Dani Rovira. Año 2021. ©APB
 

Fotografías de Natàlia Sánchez. Año 2022. ©APB